Percibo el aroma dulzón del aceite en mi espalda, las gotas frías cayendo y fundiéndose rapidamente en el calor de las palmas de tus manos. Tus labios marcando surcos para la próxima siembra, el peso de tus pechos en el arco de mi cintura y tus pezones rozando mi piel con dibujos caprichosos.
Tu respiración, la mía, suspiros.
Y la cosecha lista para la siega.
2 comentarios:
Esto es muy sensual Saudade, pero que mucho.
Besos wapa.
Jeje, se hace lo que se puede ;)
Un besote y saludos a Norma!
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