viernes, 23 de julio de 2010

Debería bastar

Un suspiro debería bastar esta mañana de invierno para alcanzar tu pecho. Un rozar de labios tenue, ingrávido, un aletear de manos en el espacio, dibujando de lejos tu figura deberían bastar.

Un cuenco improvisado en mi ombligo destinado a recoger tus lágrimas, espejo de líquido augural, debería bastar.

Una confidencia que se anuncia en la mirada, debería bastar.

La rueda que gira y me forja, me acerca a lo que mejor se amolda a vos. Y si la rueda no me hace perfecta, te ofrezco mi imperfección, y debería bastar.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

En la imperfección está la belleza...me dice Lía cada vez que protesto por mis errores.
Un besazo maja.

Rosalía Navarro dijo...

No basta, necesitas su presencia, su contacto, su luz que ilumina tu alma.
Mil besos para la parejita enamorada.
Saudade, ¿no querrás por casualidad llevarte unos días a Norma?

Saudade dijo...

Jajajaja! Mándala para acá con sus bártulos, que la ponemos de buen humor! Y después te vienes también.
Besos